miércoles, 21 de noviembre de 2007

Pasos




Nuevamente sola, aparentando que mis visiones son las mismas que pueden surgir de la mente de cualquier ser humano, convenciéndome a mi misma que todo lo que mis oídos captan en este silencio embriagador es solo producto que otorga el miedo que puedo sentir esta noche, en la que la tormenta ha pasado y las nubes que puedo ver desde mi ventana ya se han disipado ofreciéndome la hermosa vista de una maravillosa luna.

Aquella que dibuja la cara de un bebe, que tal vez muy pocos puedan ver. Pero es este miedo, el que me deja un vacío en el estomago, aquel que provoca que cada centímetro de mi habitación sea recorrido por mis ojos, atenta a cualquier ruido a ese infernal silbido que penetra mi audición haciendo que sea casi insoportable.

No hay nadie, pero presiento que no es vivo lo que me acompaña esta noche va más allá, una entidad asechando, esperando a que en cualquier estado de distracción de mi parte, será su oportunidad de atacar mis sentidos.

No puedo parar el latir de mi corazón que se hace audible para mí, para este silencio, tengo que frenarlo ya que no me deja estar alerta a aquel movimiento que tanto espero.

Un paso….

Provoca que mi cabeza gire hacia la puerta, mis manos toman las sabanas apretándolas con fuerza acompañadas con el temblor de mi cuerpo, ya comenzó, lo mismo que cada noche desde hace algunas semanas.
La puerta se mantiene cerrada, tranquila, inerte, completamente ajena a lo que viene, manteniendo ese frío provocado por las noches de invierno, madera vieja de algún árbol que sufrió la desdicha de ser el elegido para terminar adornando mi casa… mas no mi seguridad.

Dos pasos….

El crujir de la madera a cada paso que aquello da con sus pies descalzos, si es que fueran pies, o patas de un animal indomable que en alguna época juró cobrar venganza por algún motivo que desconozco, pero que pago.
Ya mi respiración no acompaña mis latidos, diferenciar cuál va más rápido me resulta difícil, aunque siento cada palpitar en mi garganta, el silbido del silencio mi respiración los pasos…. Esta noche es diferente.

Tres pasos….

Mis labios comienzan a temblar formándose un frío penetrante a mi alrededor, cada vez más cerca y los segundos se me hacen horas, tengo el impulso frenado al instante de correr a la puerta y acabar con esta tortura de una vez por todas, pero mis músculos no dan reacción alguna, mi cerebro no quiere reaccionar.

Cuatro pasos….

Puedo sentir su olor nauseabundo, de muerte, tierra, de algún pantano en el que debe habitar, tal vez cercano a esta casa, tal vez bajo mis pies.
Me siento mareada, ya esta aquí, no puedo permitir que mi vista se nuble como las noches anteriores, debo saber que es lo que me asecha.

El sonido de la manilla de aquella puerta comienza a dar el sonido anunciando que aquello esta hay, veo como comienza a girar entrando en pánico incontrolable, al punto de no darme cuenta en ese momento que mis uñas traspasan la sabana enterrándomelas yo misma en mis palmas.

De pronto una luz resplandeciente hace que gire la cabeza hacía la ventana, y un trueno da paso a la lluvia amenazadora, sus gotas caían con furia sobre todo lo que hallara a su paso, la puerta se abre provocando en mi que soltara un leve grito, el que el mismo pánico no dejo que fuera mas fuerte.

No había nada…. Como todas las noches lo que me asecha desaparece con el abrir de la puerta… mañana…. Mañana será otro día.

martes, 20 de noviembre de 2007

Un Comienzo

La imaginación que nos lleva a todos a un mundo que deseamos... al estremo imposible del sueño de estar donde queremos estar y hacer lo que nuestros deseos contemplan.
El que todos poseemos.... con sus imposibles, sus logros, llevando al estado de agrado al poder tener esos momentos de nuestras vidas en que si somos libres.

Al leer, ver una pelicula o solo usar nuestra propia imaginación, liberamos nuestras preocupaciones, alcanzamos la estrella mas lejana creando el mundo,el anhelo... nuestra libertad...

Aca algo que me gustaba hacer hace un tiempo, no solo pensarlo, si no que guardarlo para que el recuerdo no se perdiera, no soy muy buena escribiendo, pero era mi salida... mejor que escuchar una cancion que solo dura unos 4 minutos... la creacion de mi propia pelicula, en la mente... cada historia diferente... cada momento un escape...